Las temperaturas en los dos últimos días han sido de 34 a 37 grados Centígrados, muy elevadas para la estación en las que nos encontramos: la primavera. Eso, junto al viento, han provocado en el estado de New South Gales (Nueva Gales del Sur), donde se haya Sydney, más de 90 incendios en las últimas 48 horas. Algunos todavía sin controlar. La mayoría han afectado a las zonas de Springwood y las Blue Mountains. Algunos colegios han tenido que ser evacuados, y muchas personas han perdido sus casas y sus recuerdos.
Los bomberos y los voluntarios han trabajado incansablemente luchando contra unas llamas feroces provocadas por el viento que ha acompañado a la ciudad los dos últimos días.
Impresionan los testimonios de personas afectadas. Su serenidad, su calma en la gravedad de la situación. La frase que más repiten es "una casa se puede volver a reconstruir, tenemos que dar gracias porque nuestra familia, nuestros amigos están bien".
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